¿Posee Tu Empresa Un Buen Clima Laboral?
Con la entrada al mercado laboral de las generaciones millennial y cenntenial, el trabajo en general empezó a experimentar cambios importantes. Por ejemplo, el clima laboral se convirtió en un punto indispensable en toda organización y una de las consultorías empresariales más solicitadas.
Ha quedado atrás la época en donde lo más importante de un trabajo es el sueldo y la pensión. Las actuales y nuevas generaciones de trabajadores buscan una experiencia laboral completa y no sólo una fuente de ingresos; es decir, que el tiempo invertido en una organización sea de calidad. Para ello, un buen ambiente laboral es indispensable.
1. BUEN CLIMA LABORAL = MAYOR COMPROMISO Y PRODUCTIVIDAD:
Son ochos horas, y en ocasiones más, el tiempo que pasa un trabajador en su organización, por lo que una empresa debe ser como un segundo hogar, en el que más de un número de nómina, el colaborador sea tratado como un integrante de una familia.
Un buen clima laboral no sólo beneficia al colaborador, sino a toda la organización, ya que, si se procura una buena relación entre empresa y capital humano, los trabajadores se sienten más comprometidos con los objetivos organizacionales, generando mayor productividad.
2. ELEMENTOS DE UN BUEN CLIMA LABORAL:
- Dirección/Liderazgo positivo.
- Comunicación asertiva.
- Sistemas de compensación.
- Salario emocional.
- Relaciones interpersonales sanas.
- Autorrealización.
3. OBJETIVOS DE TENER UN BUEN CLIMA LABORAL:
- Facilitar la comunicación y la relación entre los miembros de la empresa.
- Aumentar la seguridad en los equipos de trabajo para participar en las acciones y decisiones de la empresa.
- Incrementar el interés en los objetivos de la empresa.
- Aumentar la satisfacción laboral a través del sentimiento de grupo y el reconocimiento.
- Evitar el ausentismo laboral.
- Mejorar la productividad laboral.
4. AMBIENTE DE APOYO:
Si bien la motivación tiene como objetivo lograr que un empleado cumpla sus funciones, el apoyo es más fundamental. Los trabajadores son seres humanos, no recursos. Por lo tanto, el gerente o líder debe ser solidario; es decir, debe mostrar real preocupación por el colaborador en general y no solo por su desempeño en el trabajo.
Un ambiente de trabajo de apoyo reconoce el deseo de un empleado por el equilibrio entre el trabajo y su vida privada. Así, refuerza la relación de confianza entre el gerente y el empleado. Cuando los jefes departamentales respetan abiertamente a los colaboradores, estos no solo alcanzan un alto nivel de desempeño, sino que permanecen más tiempo en la compañía.