El mundo y las personas se mantienen en constante cambio y con ello, la manera en la cual se organizan y componen las empresas. Una de las labores más importantes a las que se enfrenta día a día el gestor de recursos humanos en una empresa es reclutar profesionales con competencias laborales que realmente sean capaz de cumplir con sus tareas y por supuesto, trabajen eficientemente en pro de los objetivos de la misma.
Por ello, las competencias laborales son cada día más demandantes y van mucho más allá de tener un título profesional.
1. Trabajo En Equipo:
El trabajo en equipo es una cualidad que implica gestionar positivamente la interacción con otras personas. Compartir información con tus compañeros, cumplir con los plazos que afectan las labores de otros, comunicar las tareas completadas y hacer retroalimentación son algunas de las acciones que demuestran tu capacidad de trabajo colaborativo. Los empleadores valoran a los candidatos que consiguen empatizar con los demás y reunir esfuerzos para la consecución de objetivos comunes.
2. Ambición:
La ambición es una habilidad que consiste en tener claros tus objetivos a corto y largo plazo. Definir un plan de acción en tu lugar de trabajo te servirá para avanzar en tu carrera profesional y mostrar a los empleadores tu deseo de evolucionar. Algunas acciones que demuestran ambición son ofrecerse como voluntario para proyectos, ofrecer asistencia a otros compañeros durante la ejecución de sus tareas o unirse a una organización profesional.
3. Responsabilidad:
Sin importar el puesto que ocupas en una empresa, la responsabilidad constituye una fortaleza que tiene gran valor dentro del ámbito laboral. Está formada por pequeñas acciones como cumplir con todas tus tareas, asistir puntualmente a tu jornada de trabajo, evitar conductas que pongan en peligro a tus compañeros, entre otras. En añadido, puede trasladarse a un sentido más amplio como poner en práctica la confidencialidad cuando se está diseñando un nuevo proyecto.
4. Resolución De Conflictos:
La resolución de conflictos es otro aspecto relevante cuando se habla de las competencias laborales, ya que hace referencia a las prácticas que implementas para solventar desacuerdos en el espacio de trabajo. A lo largo de tu carrera es probable que te encuentres con personalidades muy diferentes y que presenten un estilo de trabajo que difieran del tuyo. En esos casos, debes conseguir equilibrar tu punto de vista con los de las demás personas para encontrar soluciones efectivas.
5. Orientación Al Cliente:
La orientación al cliente no es una opción cuando se trata de lograr una alta competitividad en el mercado, es una obligación. Un candidato con competencias laborales en atención al cliente que realmente atienda las necesidades de los mismos será mucho más productivo dentro de la organización y capaz de alcanzar mejores resultados. Esto aplica no solo para los clientes externos que compran su producto, también es importante que el candidato mantenga una buena actitud y disposición con los clientes a nivel interno.
6. Creatividad E Innovación:
Va tomando más relevancia conforme avanza la tecnología y el mercado se vuelve más competitivo. Los colaboradores deben ser agentes de cambio dentro de las organizaciones; por suerte, los profesionales de hoy día salen de sus aulas de clase con ideas frescas e innovadoras que, si son bien aprovechadas, pueden ayudar a su organización a mantenerse en la vanguardia. Esta es una competencia muy importante en cualquier profesional, no solo se trata de proponer nuevas herramientas que le permitan a su organización mejorar sus procesos, sino también de saber comunicarlas, ser capaz de ponerlas en marcha y presentar planes de acción que le permitan llevar un control y medir los resultados obtenidos.
7. Manejo Del Estrés:
El manejo del estrés es una cualidad que ha ganado protagonismo en el mundo profesional, debido a que indica que un individuo consigue equilibrar sus tareas laborales junto con su vida personal. Cuando se gestiona correctamente el estrés, se obtienen mayores niveles de productividad e incluso incrementa la satisfacción laboral. Una persona con esta habilidad logra continuar con sus responsabilidades a pesar de enfrentar situaciones adversas.
8. Comunicación:
Cualquier organización está compuesta por trabajadores de diversos antecedentes, culturas y estilos de comunicación. Por ello, es esencial aprender a transmitir correctamente los mensajes de forma verbal y escrita. Todas las prácticas de comunicación efectiva comienzan con ser un buen oyente, prestar atención a los demás, mostrar empatía y aprender a expresarse mediante un lenguaje que se adapte a cada receptor.
9. Pensamiento Crítico:
El pensamiento crítico es una competencia laboral que consiste en tener una visión o panorama objetivo de los escenarios que se desarrollan en el entorno profesional. Durante este proceso, la persona pone en duda múltiples afirmaciones para encontrar soluciones creativas a problemas cotidianos. Desarrollar esta habilidad agrega valor a tu perfil profesional y te permite identificar áreas para mejorar.
10. Liderazgo:
El liderazgo en una competencia laboral clave para ocupar posiciones de alto rango en las empresas, ya que amerita contar con un conocimiento profundo de tu área y saber gestionar a grupos de empleados. Un buen líder consigue motivar a su equipo e impulsarlo a su evolución profesional y personal. También se caracterizan por tener una visión clara respecto a cómo delegar tareas y responsabilidades.