Tu marca personal es el sello que te distingue más allá de los trabajos o negocios que tengas a lo largo de la vida. Además de la reputación y valores universales como la honestidad, la eficiencia, la innovación o la transparencia, lo que debe definir tu marca personal es qué tipo de competencias profesionales tienes, tanto las que has acumulado como las que vas desarrollando. Esto determinará hacia dónde quieres cultivar tu marca y tu propuesta de valor.
En este artículo queremos ayudarte y facilitarte la correcta construcción de tu marca personal con unos consejos básicos capaces de desarrollar y potenciar de forma óptima tu marca personal. ¿Estás preparado? ¡Toma nota! Comienza a pulir los detalles que te harán diferente al resto.
1. Conocer El Estado Actual De Tu Marca:
El primer paso es saber dónde estás parado. Lo más fácil es preguntar a amigos y colegas cercanos cómo te perciben en relación al trabajo que haces, gente que sepas que te responderá con absoluta sinceridad. Pregúntales cuáles son tus principales características como ejecutivo o profesional, qué cualidades destacan más de ti en el día a día de tu trabajo.
2. Busca Inspiración En Algún Icono:
Para progresar en cualquier faceta es necesario aprender de los mejores, de aquellos que han tenido y están teniendo cierto éxito en lo que realizan. No se trata de copiar y/o “fusilar” sus métodos y acciones, pero si tener conciencia de los puntos clave que los han hecho diferenciarse del resto. Aquellas marcas personales que destacan sobre las demás y consiguen objetivos y éxitos, son portadores de ciertas dosis de credibilidad e inspiración.De estas últimas cualidades podemos tomar nota para mejorar nuestra propia marca personal.
Existen muchas personalidades y profesionales de diferentes sectores que han sabido llevar su marca personal a cotas de éxito difíciles de superar, además de conseguir una clara diferenciación entre su propia marca personal y la de negocio o empresa.
3. Activa Tu Presencia En Línea:
Aunque la interacción personal es primordial en la definición de nuestra marca, en el mundo de hoy es vital tener una presencia online sólida y congruente. Eso representa ampliar exponencialmente tu espectro de influencia más allá de tus colegas, clientes o gente con la que sueles interactuar por trabajo.
4. Presta Atención A La Imagen:
Se puede estar más de acuerdo o no pero el dicho” vale más una imagen que 1000 palabras” es toda una realidad si deseamos potenciar nuestro plan de marca personal. No existe marca personal de éxito que no esté asociada a una imagen y esta imagen ha de responder a las cualidades y características que caracterizan dicha marca personal. En otras palabras, imagen personal y marca deben estar vinculadas: una debe hablar de la otra y viceversa.
Las fotos son el instrumento básico para mostrar tu imagen hacia los demás. Esta debe ser cuidada al detalle y ser lo más profesional posible. Nada de ediciones caseras, oscuras, borrosas y, en general, fotos de calidad y adecuadas para lo que se desea representar. Se trata no solo de fotos de carácter profesional, recordemos que las redes sociales también muestran un lado más personal. Todo este contexto ha de ser bien gestionado, la imagen tiene un peso importante y debe de correr en paralelo al resto de cualidades de la marca personal.
5. Desarrolla Una Comunidad Alrededor De Tu Marca:
Cuando desarrollamos una marca personal la promocionamos ante diferentes plataformas con el fin de llegar al mayor público posible. Tanto en blogs, redes sociales, etc. El mensaje ha de calar en la gente para que puedan comentar, generar interacción y que se hable de nosotros. Crear una comunidad alrededor de la marca es fundamental pues produce el denominado valioso feedback. Un buen feedback es capaz de atraer a más personas y con ello más oportunidades. Por desgracia, una comunidad no crece sola alrededor de tu marca, tú y solo tú serás el responsable de crear y hacer crecer esta comunidad afín a tu marca personal.