Tips Para Crear Un Espacio De Trabajo Productivo

Tips Para Crear Un Espacio De Trabajo Productivo

La forma en que ordenamos y proyectamos nuestro espacio de trabajo puede tener gran repercusión en nuestro nivel de productividad, es por esto que es importante que consideremos algunos puntos básicos cuando decidamos hacer nuestro propio escritorio.

¡No tiene por qué ser un lugar especial ni necesitas gastar mucho dinero, sólo debes tener en cuenta los siguientes puntos que aquí te detallamos!


1. ILUMINACIÓN:

Si es posible, trata de crear tu área de trabajo en una zona cerca de una ventana. La calidez de la luz del sol no tiene precio y definitivamente te ayuda si no estás es un “estado de ánimo de trabajo”.

2. AROMAS:

Los aromas también pueden ayudar a aumentar la productividad, utilizar aceites esenciales en el escritorio o velas perfumadas, puede contribuir a sentirnos mejor. Por ejemplo, el olor a limón ayuda a la concentración, la lavanda a la relajación y el jazmín produce sensación de optimismo y energía. Contra el cansancio mental y para ayudar a la concentración, el aroma de canela es la solución.

3. COLORES A TU FAVOR:

Al igual que los olores, los colores tienen mucho que ver con tu nivel de productividad. Y es que los colores de tu lugar de trabajo tienen un impacto directo en tu estado de ánimo y la productividad. Por ejemplo, el color amarillo para las paredes o muebles es estimulante, acogedor y luminoso; mientras que el rojo es más hostil y agresivo. El color verde es más calmante y relajante, y el gris, aunque es un color asociado con la inteligencia y la sabiduría, no causa un impacto positivo en la productividad.

4. PLANTAS:

Plantas, flores, suculentas o cactus. ¡Las plantas frescas pueden aportar mucha vida a tu espacio de trabajo y eso simplemente te hará feliz!

5. COMBATIR EL CANSANCIO:

Es fundamental facilitar el acceso a agua fresca, si tienes máquinas expendedoras asegúrate de que en ellas se ofrece comida natural y saludable, que aporte energía.

6. CONSEGUIR LA TEMPERATURA ADECUADA:

La concentración no obedece únicamente a factores mentales. Aspectos como la temperatura inciden de manera directa en la capacidad de ser más eficientes. Si la temperatura es demasiado alta o baja, puede provocar estrés térmico, irritabilidad y disminución de la concentración. En casos más extremos, podrían producirse síncopes, deshidratación, golpes de calor (en el caso de temperaturas altas) o molestias, disminución de la destreza manual, de la mental, de la capacidad física o incluso efectos respiratorios (en el caso de exceso de frío). Por eso, encontrar una temperatura estable y moderada, que permita a todos los trabajadores de un mismo entorno sentirse cómodos, es uno de los objetivos a perseguir.