¿Qué Es La Dismorfia Monetaria Y Cómo Afecta Tus Finanzas Personales?

¿Qué Es La Dismorfia Monetaria Y Cómo Afecta Tus Finanzas Personales?

Así como la dismorfia corporal es una percepción distorsionada de cómo luce nuestro cuerpo, la dismorfia financiera es una percepción alterada de nuestra realidad económica. Y aunque no es como tal un trastorno mental, el término sirve para describir un fenómeno que muchos viven.
No importa si ganas bien o si te esfuerzas mucho por ahorrar: si vives desde la carencia, el miedo o la negación, tu mente puede hacerte creer que estás peor, o mejor, de lo que realmente estás.
La Dismorfia Monetaria Se Caracteriza Por:
1. Poseer una percepción distorsionada del dinero que se gana y cuánto se puede gastar, lo que conlleva a que las personas vivan con un estándar económico irreal e incurran en afectaciones en sus finanzas personales.
2. Tener una percepción que el dinero es infinito.
3. Afectar principalmente a la generación Millennials y generación Z, debido a que han estado expuestos a redes sociales y digitales y a una sociedad con estándar de consumo y éxito elevados.
4. Ansiedad por el dinero, junto con un miedo constante a no contar con suficiente dinero.
5. Ignorar las necesidades financieras básicas como: ahorro para jubilación, fondo de emergencia, dando prioridad a experiencias y bienes lujosos.
6. Gastos excesivos en ropa, gadgets y experiencias que ven en las diferentes redes sociales.
Principales Causas De La Dismorfia Financiera:
·         La negación de la situación financiera real.
·         El optimismo irreal sobre ingresos en el futuro.
·         Falta de educación financiera.
·         Baja autoestima.
·         Deseo de aceptación social.
·         Necesidad de compensar la inseguridad personal.
·         Constante exposición a un estilo de vida orientado a la ostentación en redes sociales.
·         La idea que el dinero es para disfrutar en el momento presente sin pensar a futuro.
·         Obsesión por aparentar cierto nivel de éxito.
Cómo Superar La Dismorfia Del Dinero
Si te identificas con alguno de los puntos anteriores, hay pasos que puedes seguir para reparar tu relación con el dinero.
Desarrolla tu conciencia financiera. invita a las personas a identificar sus miedos relacionados con el dinero. Dedica una semana a registrar la proporción de pensamientos positivos y negativos. Luego, escribe una lista de las cosas que valoras y que te hacen sentir realizado, además del dinero, como tus relaciones sociales, tu comunidad y tus pasiones. Cuando surja un pensamiento negativo sobre el dinero, desvía la atención de tus finanzas y concéntrate en las cosas que anotaste.
Tómalo con calma. Superar la dismorfia financiera no es algo que se logre de la noche a la mañana. La realidad es que son los pequeños cambios graduales, como ser más consciente de cómo gastas en una sola cosa, los que suelen generar pasos positivos y sostenibles hacia el logro de tus objetivos. Avanzar con regularidad puede ayudarte a replantearte tu perspectiva sobre el dinero y a desarrollar una relación sana con tus finanzas.
Crea un presupuesto. Una vez que tengas claros tus gastos, establece límites. Los jubilados y las personas mayores a menudo tienen miedo de usar su dinero porque creen erróneamente que gastan demasiado, El conocimiento genera confianza, y saber exactamente cuánto dinero gastas cada mes te dará más libertad para disfrutarlo.
Deja de compararte con los demás. Comparar frecuentemente tu estilo de vida con el de otras personas puede generar malos hábitos de consumo, sobre todo en la era digital actual, donde la gente publica fotos de sus viajes de lujo y bolsos de marca en Instagram, Facebook y otras redes sociales. Un estudio reveló que las personas que pasan más de 3 horas al día en redes sociales tienen una probabilidad significativamente mayor de tomar decisiones financieras impulsivas. Así que intenta reducir tu tiempo en redes sociales: establecer un límite de 30 minutos al día puede disminuir la ansiedad, la depresión y el miedo.
Pide ayuda. Si te sientes agobiado por el tema del dinero, considera la posibilidad de trabajar con un asesor financiero que pueda revisar tus finanzas. Esto puede ayudarte a tranquilizarte y darte cuenta de que probablemente estás manejando mejor tu dinero de lo que crees. Si necesitas un pequeño impulso en este aspecto, un asesor puede ofrecerte consejos para elaborar un presupuesto que te ayuden a sentirte más seguro en tu camino hacia la jubilación. (SG)