
Los Errores Publicitarios Más Comunes
Acciones como recopilar información relevante sobre los competidores o analizar los resultados de las estrategias publicitarias, ayudan a identificar posibles errores publicitarios: áreas de oportunidad que puedan convertirse en ventajas.
Estos son algunos de los errores publicitarios más comunes:
1. Investigar Poco:
«Nuestros productos no se venden tan rápido creíamos; rápido, vamos a imprimir anuncios para dar a conocer nuestra marca.” Esta frase ha sido pronunciada con más o menos exactitud por responsables de muchas empresas pequeñas lo largo de su historia. El error es precipitarse en lanzar una campaña publicitaria sin pensarlo bien. Es necesario estudiar los materiales de marketing de sus competidores y averiguar cuáles de sus anuncios son más eficaces y cuales lo son menos. Existen estudios periódicos que evalúan la efectividad de las campañas, la clave es estudiarlos y aplicar las conclusiones a la publicidad propia.
2. Tratar De Llegar a Todo El Mundo:
Como la publicidad exterior ocupa espacios transitados por amplios sectores de población, las marcas a menudo cometen el error de querer crear anuncios que lleguen a todo el mundo. La gente es demasiado diversa y puede tener diferentes necesidades y deseos al ver su publicidad. Cuando se trata de generar marca y presentar productos al público es fundamental elegir un target concreto.
3. Diseños Mediocres:
Por muy bueno que sea su producto o servicio, si no consigue llegar a su audiencia no va a venderse solo. Un diseño adecuado impulsa a la compra y refuerza el compromiso con la marca por parte de los consumidores. Los anuncios más eficaces consiguen una respuesta emocional de su audiencia siendo divertidos, creando un sentido de comunidad o apelando a valores sociales comunes.
4. Dirigirse Al Publico Adecuado:
Intentar vender cualquier producto o servicio a un público equivocado, ocasiona un incremento en el porcentaje de rechazo.
5. Llenar Con Demasiada Información El Anuncio:
Una de las reglas de la publicidad es ser concisos y directos, por ello se surgiere evitar caer en discursos redundantes que confundan al cliente. La importancia del análisis de la competencia está en saber identificar y observar los errores, para poder sacar provecho de ellos.