Finanzas Personales Si Estas Desempleado

Finanzas Personales Si Estas Desempleado

Estar desempleado es una situación muy complicada, pues la vida nos puede cambiar de un momento a otro, aún más si tienes obligaciones y una familia por la que velar. Dejar de recibir ese ingreso quincenal o mensual es trágico cuando las deudas son las que se acumulan.
Si pasan los días o los meses y ya empiezan a terminarse esos ahorros y la liquidación que recibiste y aun no te ubicas laboralmente, lo mejor es que pongas en práctica estos consejos que te compartimos en nuestro blog.
1. Haz Un Diagnóstico De Tus Ingresos Y Prioriza Tus Gastos Esenciales
El primer paso es entender con claridad tu situación actual. Haz un listado de todos los ingresos con los que cuentas: cesantías, ahorros, ingresos ocasionales, ayudas familiares o apoyos temporales. Luego, identifica cuáles son tus gastos prioritarios, como alimentación, vivienda, salud, servicios públicos o deudas activas. Ten presente que la idea no es dejar de vivir, sino ajustar temporalmente tus hábitos para tener mayor control. Recortar algunos gastos puede darte un respiro mientras llega una nueva oportunidad laboral.
Sugerencia: Usa una hoja de cálculo o una app gratuita para registrar cada gasto. Tener visibilidad te permitirá tomar decisiones más conscientes y evitar sorpresas a fin de mes.
2. Usa Tus Cesantías De Manera Inteligente
Las cesantías son un ahorro precisamente para cubrirte en momentos como este. Si tienes acceso a ellas, úsalas de manera estratégica: evita gastarlas en cosas que no sean prioridad y distribúyelas en función del tiempo que estimes estar sin empleo. También puedes usar tus cesantías para pagar tu arriendo, cubrir estudios o ponerte al día con tu crédito de vivienda.
3. Si Tienes Deudas, Actúa Con Anticipación
Uno de los errores más comunes durante el desempleo es dejar de responder a las obligaciones financieras sin comunicarlo. Si tienes créditos, habla con tus entidades financieras antes de que haya mora. Algunas ofrecen alternativas como períodos de gracia, ampliación de plazos o planes de pago ajustados. Evitar el diálogo solo agrava la situación. Mostrar voluntad y mantener una actitud proactiva puede abrirte puertas.
Tip: Prioriza tus deudas según urgencia y tasa de interés. Pagar primero las más costosas puede ayudarte a evitar cargos adicionales.
4. Mantén La Mente Activa Y Proyectada
El desempleo no es una pausa definitiva, sino una etapa de transición. Y aunque puede ser difícil verlo así al principio, también puede ser una oportunidad para actualizar tu perfil, aprender nuevas habilidades o explorar áreas laborales diferentes.
Consejo: Aprovecha este tiempo para fortalecer tus habilidades, descubrir lo que puedes aportar y prepararte con más seguridad para futuras entrevistas. Lo que aprendas hoy puede marcar la diferencia mañana.
5. Cuida También Tu Bienestar Emocional
La estabilidad financiera está estrechamente ligada al bienestar emocional. El estrés, la ansiedad o la sensación de fracaso pueden hacer más difícil pensar con claridad. No te exijas más de la cuenta. Permítete descansar, hablar con tu familia, buscar apoyo profesional si lo necesitas y mantener espacios para ti.
Ten presente: no estás solo o sola. Hablar de lo que sientes y pedir ayuda también es parte de cuidar tus finanzas.
6. Evalúa Oportunidades De Ingreso Alternativas
Mientras encuentras un nuevo empleo estable, puedes explorar formas temporales de ingreso. Desde actividades por encargo (freelance), ventas por catálogo o incluso aprovechar algún talento (como cocinar, hacer manualidades o dar clases) para generar ingresos ocasionales.
Lo importante es no asumir riesgos innecesarios ni caer en propuestas engañosas que prometen dinero rápido. Evalúa cada posibilidad con calma.
7. Rodéate De Redes De Apoyo
Habla con personas cercanas, familiares, amigos o antiguos compañeros. Muchas veces, las oportunidades llegan por medio de la voz a voz. También puedes participar en ferias de empleo, espacios virtuales o comunidades en redes sociales relacionadas con tu perfil.
Fortalecer tu red de contactos, o hacer Networking, no siempre implica asistir a eventos formales. A veces basta con una conversación honesta, compartir tu situación o mostrar interés en nuevos proyectos. Mantener el vínculo con quienes han trabajado contigo o están en tu sector puede abrirte puertas cuando menos lo esperas. (SG)