Quizás estés intentando acumular dinero en tu cuenta de ahorros para un fondo de emergencia, pero siempre parece surgir algo que te regresa al punto de partida. Hay muchas maneras sencillas de empezar a ahorrar dinero cuanto antes para ayudarte a alcanzar tus metas financieras.
Hoy vamos a darte algunos útiles consejos para ahorrar dinero que te ayudarán a aumentar tu ahorro y a lograr tus objetivos.
1. Define Tus Objetivos Vitales:
Los objetivos vitales son aquellos propósitos que queremos conseguir en nuestra vida. Varían mucho de una persona a otra, pero son la principal fuente de motivación a la hora de ahorrar (porque para conseguirlos vamos a necesitar dinero) y nos ayudan a tomar decisiones. Tu objetivo vital podría ser jubilarte a los 50, dar la vuelta al mundo, comprarte un coche clásico, reformarla casa familiar del pueblo… Lo importante es que te marques metas que sean específicas, medibles, alcanzables, realistas y programadas en el tiempo.
2. Productos Financieros Para Ahorrar:
Este sería el último paso necesario para poder incrementar con éxito los ahorros. Tras todo lo anterior, se debería considerar la opción de elegir aquellos productos de ahorro que más convengan, según la necesidad de cada persona o familia. Se trata entonces de optar por aquellos productos que sean más cómodos para cada persona y según el perfil de ahorrador. El tipo de instrumento financiero que se utilice para este fin dependerá de la meta para la cual se ahorra.
3. Practica El Pre Ahorro:
Muchas veces cometemos el error de ahorrar solo aquello que nos sobra. Pagamos todo y, si nos queda algo, entonces lo guardamos. Y así no conseguirás alcanzar tus objetivos de ahorro. La mejor opción es practicar la política de pagarte primero a ti mismo. Una vez que recibas tu sueldo, retira la cantidad que hayas decidido ahorrar y ponla directamente en una cuenta que uses solo para ahorrar o en un producto de ahorro.
4. Págate A Ti Mismo:
Uno de los mayores problemas que surgen cuando se trata de ahorrar es que se tiende a dejar como ahorro la cantidad que nos queda a final de mes tras pagar facturas, hipoteca y todos los gastos que llegan durante esas semanas. Sin embargo, si se hace al revés el beneficio puede ser mucho mayor si convertimos al ahorro una parte más a la hora de administrar nuestro dinero mensualmente. Para ello, lo recomendable esapartar una cantidad, por pequeña que sea, al inicio de mes, cuando se recibe el salario, es decir, pagarnos a nosotros mismos. De esta forma, a lo largo de las siguientes semanas tendremos que administrar el resto del presupuesto, pero sin haber descuidado el ahorro.