Como bien saben las empresas, incluso el empleado mejor preparado puede rendir por debajo de sus posibilidades si no está motivado. Por el contrario, una plantilla motivada y comprometida es mucho más productiva, consigue mejores resultados y presenta una tasa de rotación mucho menor.
Los departamentos de recursos humanos se esfuerzan por desarrollar propuestas de valor al empleado que sean capaces de impulsar y mantener esa motivación. Además, gracias a las nuevas tecnologías, las compañías de todos los tamaños pueden incorporar soluciones que les pueden hacer mucho más fácil esa labor, por lo que se trata de estrategias de las que se pueden beneficiar ampliamente.
1. Flexibilidad:
El trabajo flexible aumenta la motivación en los trabajadores y además mejora la productividad. La flexibilidad puede aplicarse a través de horarios, home office o incluso en la vestimenta que hay que llevar a la oficina. Los líderes deben saber identificar cuál es la estrategia que mejor funciona.
2. Fomenta El Reconocimiento:
El reconocimiento del trabajo es una de las claves para inspirar al equipo y poder generar un buen ambiente laboral. Felicita a tus colaboradores cuando tengan un acierto y pregúntales cómo lo han hecho para compartir la experiencia con el equipo y crecer en conjunto.
3. Cuida El Ambiente De Trabajo:
Si los trabajadores se sienten a gusto tanto con el lugar como con la gente que les rodea en el trabajo, estarán más motivados para seguir avanzando y alcanzar nuevos objetivos. Por eso, debes potenciar que el ambiente sea favorable con actividades en común dentro y fuera del trabajo para conseguir estrechar lazos de amistad entre los trabajadores, fomenta la participación y la implicación en los proyectos de la empresa, trabaja en mejorar la comunicación constantemente.
4. Comunícate:
Para que un trabajador esté cómodo y motivado es fundamental que se sitúe dentro de la empresa, que sepa qué se espera de él, cuáles son sus tareas y cómo debe actuar en cada momento. Un trabajador que no sabe qué debe hacer ante una nueva situación es un trabajador inseguro, y por lo tanto, poco motivado. Por eso es importante que te tomes un tiempo para hablar con cada uno de los trabajadores del equipo y explicarles bien sus tareas y resolver dudas.
5. Involucra A Tu Gente En Las Decisiones:
Nada afecta más un trabajo en equipo que el hecho de que las decisiones sean tomadas por un líder autócrata. Para evitarlo, impulsa la generación de ideas, abre tu mente y motiva a cada colaborador a compartir su opinión. Si tienes esta retroalimentación, será más fácil implementar cualquier cambio o estrategia.Con esta acción y como tarea constante el líder debe ser capaz de identificar, gestionar y desarrollar el talento de nuestro equipo, debe de tener un seguimiento personalizado: dedicar un tiempo mensual a preguntarle por su progresión, sus inquietudes o necesidades, siempre generando confianza, y autonomía. Un colaborador motivado es mucho más productivo y además es feliz con lo que hace.