Enseñar a los niños a ahorrar puede ser el primer paso para que en el futuro logren cumplir sus sueños, como el de tener vivienda propia, viajar, estudiar o crear su propia empresa.
Así es, la educación financiera desde pequeños les permite conocer la importancia del buen uso del dinero, y cómo ahorrarlo. Además, es la oportunidad para explicarles otras formas de ahorro y cuidado de los recursos disponibles en nuestras viviendas, como la energía, el agua, y sus pertenencias.
¿Por Qué Es Importantes Que Tus Hijos Conozcan De Finanzas?
Es recomendable que los niños puedan saber de estos temas para tener una buena salud financiera cuando crezcan y que no les cueste trabajo alcanzar sus metas. La mejor forma de dar una enseñanza que perdure para toda la vida es predicar con el ejemplo. Será muy complicado mostrar el camino del ahorro a un pequeño si tú mismo no puedes o no sabes cómo ahorrar para ti mismo o para la familia.
Así que antes de que pasemos a las estrategias que te mostrarán cómo enseñar a los niños a ahorrar, será necesario que tengas claro que los niños tendrán que aprender de ti y lo que les muestres con tus acciones.
¿Cómo Enseñar A Los Niños A Ahorrar?
Para ayudar a los niños a desarrollar el habito del ahorro, deberás, primero, enseñarles sobre buenas costumbres en general; sobre todo para que aprendan que una buena práctica se desarrolla con constancia y disciplina. Después, deberás mostrarles la importancia del dinero. Esto depende de cada quién pues, todos vemos el dinero de forma diferente y le asignamos un valor único, aunque parecido. Es por ello que debes mostrarles la relevancia del dinero antes de que tengas un plan de cómo enseñar a los niños a ahorrar.
¿Cómo Desarrollar El Hábito? 4 Claves
Presta atención a estos consejos para enseñar a los niños ahorrar:
Una vez que le hayas mostrado a un niño la importancia del dinero, deberás enseñarle que para conseguirlo primero debe esforzarse. Déjalo que reflexione sobre cómo obtienes tú el dinero y el esfuerzo que requieres. Que un niño ayude con algunas tareas del hogar que sean fáciles y simples de realizar son una buena forma de enseñar con un ejemplo adaptado a su realidad.
Dale dinero. Lleguen a un acuerdo en el que reciba dinero por alguna acción es específico. Si bien no se aconseja que le condiciones el dinero a que haga sus labores de la escuela o de la casa, es recomendable que haya actividades extra que le generen un rédito económico. Es importante que el dinero que le des tenga cierta periodicidad establecida.
Enséñale que si gasta todo el dinero no habrá más hasta que llegue el siguiente día en el que le das. Pero después enséñale que, si guarda un porcentaje o todo, en un futuro podrá contar con una mayor cantidad de dinero.
Lo ideal es que le ayudes a establecer una meta de ahorro y juntos puedan trazar el camino para llegar al objetivo deseado. Abrirle una cuenta de ahorro puede ser de mucha ayuda para que aprenda cómo interactuar con el entorno financiero de los bancos.