Existen cuatro estilos de comunicación principales que las personas utilizan y que suelen encontrarse en el trabajo. Cada uno de ellos tiene sus propias características y formas de interacción, por lo que saber reconocer tu estilo y el de tus colegas puede evitar malentendidos y aumentar la productividad de una organización.
En este blog, analizamos los 4 estilos de comunicación principales, su importancia y algunos consejos para convertirse en un buen comunicador.
1. Dominante:
Los miembros del equipo con estilo de comunicación dominante son intensos, eficientes y centrados en los resultados. Por lo general, los detectas porque son competitivos y firmemente orientados a lograr el éxito. Si bien estos individuos son líderes naturales de equipos, sus debilidades pueden ser la impaciencia y el exceso de confianza.
Consejo: A los miembros dominantes de un equipo ofréceles desafíos para que se sientan motivados en el trabajo, pero recuérdales todo el tiempo que deben centrarse siempre en la misión del equipo y de la empresa.
2. Influyente:
Los miembros de un equipo con estilo de comunicación influyente son quienes socializan continuamente en el grupo. Estas personas saben cómo cautivar a otros y crear un ambiente con buena energía y mucha participación. Los influyentes de tu equipo lograrán excelentes relaciones con los clientes porque disfrutan de hablar con otras personas.
Consejo: Para que los miembros influyentes del equipo no pierdan el eje, asígnales tareas acordes a sus habilidades. Permíteles expresarse en sus roles y controla que no distraigan a los demás.
3. Consciente:
Los miembros del equipo con estilos de comunicación consciente son personas que logran gran parte de lo que se proponen. Este tipo de integrantes trabajan arduamente para producir trabajos sin errores y se las ingenian para aprender siempre algo más. Un miembro consciente del equipo puede preferir trabajar de manera independiente para tener el control de su propio desempeño.
Consejo: Estos miembros del equipo tienden a preferir liderazgos objetivos para no dar pie a los problemas de comunicación. Permite que los integrantes conscientes del grupo trabajen en proyectos en los que se destaquen. Bríndales instrucciones claras y comentarios medibles sobre su desempeño.
4. Estable:
Los miembros del equipo con estilo de comunicación estable valoran la uniformidad y la estabilidad de los ambientes de trabajo. A diferencia de lo que sucede con los del estilo dominante, quienes disfrutan de los desafíos, este tipo de miembros prefiere un rol más predecible en sectores como los de Atención al cliente o TI. Se sienten cómodos y tranquilos en un entorno laboral relajado.
Consejo: A los miembros estables del equipo ofréceles un ambiente laboral sin demasiadas alteraciones. En caso de que se produzcan cambios, y siempre que sea posible, preséntaselos de forma incremental. Escucha activamente a estos integrantes para que sientan que se les presta atención y ofréceles instrucciones claras sobre las tareas complejas, para que no queden dudas sin responder.